Los de cdwow tienen durante todo el día todos sus productos a 1 libra menos. Así tenemos precios espectaculares de discos de novedad por apenas 7 libras (no llega a 8 euros el nuevo de Adele) o la versión extendida de The National por 6 libras.
Yo me he pillado por 4 libras cada uno el "Laws of illusion" de Sarah McLachlan y el "We are born" de SIA. Sólo estará durante este día, y os recuerdo que no cobran gastos de envío, todo por la patilla.
También ponen de oferta los discos en presalida, como el de Elbow, PJ Harvey o Lady Gaga, por menos de 8 libras. Si estábais detrás de compraros un disco, aprovechadlo porque es el momento.
El pop electrónico sueco está viviendo un momento esplendoroso con personal como Robyn o la que aquí comentamos, Lykke Li.
El 3 de Marzo saldrá el "Wounded rhymes", la continuación de "Youth novels", un disco que tuvo muy buenos resultados en su país natal y del que se espera que la consagre en el mercado internacional.
El nombre de Lykke Li no os dirá nada de por sí, pero si decimos que ha colaborado en lo último de los escandinavos Röyksopp o con Kleerup, quizás podráis ubicarla mejor.
Acaba de presentar nuevo sencillo, "I follow rivers", del cual ya se puede ver el clip, rodado en los helados paisajes de Gotland, Suecia.
Para amantes de Bat for Lashes y en general, la buena música electrónica con carismáticas voces femeninas.
Quién nos iba a decir allá por octubre del 2009 , cuando en este blog hablábamos del nuevo disco de Train, "Save me San Francisco", que tendrían tanto éxito con ese "Hey soul sister".
Superando con creces aquel "Drops of Jupiter" de años atrás, podemos decir que el 2010 ha sido el año de Train, una formación que no ha dejado de sacar discos, que iba perdiendo gas, el tren se iba deteniendo hasta que una tremenda promoción para apoyar un tema que va ganando con las escuchas sin llegar a hartar, disparó el acelerador hasta ponerles de nuevo en las primeras planas de la popularidad.
No se han quedado relegados a un éxito de sola canción, y los singles se siguen sucediendo, año y pico después de su publicación.
Lo último es la predilección favorita de las bodas en USA, este "Marry me" tan tierno como el gato de Shrek cuando pone ojitos, que está causando furor con su mensaje de amor eterno que tan bien encaja en las proposiciones maritales.
Si no hubiera sido por esa hermana del alma, canciones como ésta jamás estarían teniendo la buena acogida que están recibiendo. Apenas con una guitarra acústica y un piano, "Marry me" nos muestra sentimiento y empalago a partes iguales. A los enamorados les encantará y pronto la adoptarán como su himno particular, la regalarán en bonitos cds y dirán que todo lo que te quiero decir está en esta canción.
Cuando las palabras no nos salen, siempre hay alguien que puede hablar mejor que nosotros y si os sentis con la seguridad de confirmar vuestra relación, no lo dudéis, haceros con el "Marry me" y quedaréis estupendamente.
Os dejo el video, donde sale una guapísima camarera algo harta de su trabajo que siente empatía con el intérprete de Train, que la mira con cariño, sin mediar una palabra.
¿Qué saldría si juntamos voces a lo Daft Punk con una tontipop de la triunfita Natalia? Pues probablemente algo como a lo que suena "Feel the magic", el primer sencillo de "Un viaje en noria", el estrenadito disco de Pastora, publicado esta semana.
Una nueva aportación de Pastora que está dejando al personal más gélido que el clima que estamos sufriendo. Algunos temían que Pastora se hubiera decantado por el inglés al conocer el nombre del single, lo cual resulta que no es más que un par de líneas, lo demás es castellanísimo con referencias a la química cuántica y más jerga de la usual en Pastora.
"Feel the magic" no es una "Lola", "Desolado" o "Cuánta vida". Es una composición que mezcla una letra explosiva con los elementos ya conocidos, y que son los que engrandecen esta formación, con una música que parece escrita por Milkiway de La Casa Azul. No diremos que hubiera encajado en una producción de Vale Music (glups! ya lo dijimos), y que nos hubiera gustado más que se hubieran acercado a la experimentación de "Circuitos de lujo", que tantos buenos minutos nos dió.
Por lo que parece, el resto de "Un viaje en noria" es variopinto, según la noria va cogiendo altura o no, hay temas poperillos con guitarra sin mucha pretensión y otros más singulares, ninguna destaca enormemente y nada es desdeñable.
Os dejo el video de "Feel the magic", el cual al menos transmite muy buena onda. Si no vendo mi coche, soy capaz de hacer lo mismo que ellos.
Pasamos de la euforia de un día de fiesta a la tranquilidad del día siguiente, en el que los "chunta-chunta" de las discos son sustituidos por una caricia aterciopelada de cuerdas.
Recuerdo aquel programa de los 40 Principales de hace muchos años, cuando los40 todavía ponía música decente, que era "Plásticos y decibelios", presentado por Julián Ruiz. Había mucha expectación ante el inminente trabajo de Depeche Mode llamado "Songs of faith and devotion", grabado parcialmente en Madrid. Según palabras del grupo, realizar ese disco había sido una completa agonía. Dave Gahan estaba atravesando una fuerte addición por las drogas, la cual había desestabilizado a la banda, retrasando las grabaciones intermitentemente y provocando que el sucesor de "Violator", el mayor éxito de Depeche, no acabara de salir a la calle.
Flood, su productor por aquel entonces y mano ejecutora de los logros más destacados de Depeche Mode, estaba hilvanando un aura de oscuridad en las nuevas canciones de Martin Gore y se auguraba un renacer nuevo.
Así fue anticipado con el potente "I feel you", un tema que dejaba a un lado la electrónica para abrazar las guitarras, convirtiéndose en uno de los temas rock más famosos de los 90. Dave se había dejado el pelo largo, y su cuerpo fibrado y lleno de tatuajes otorgaba un aspecto casi de banda metal a la formación, que por primera vez aspirada a entregar su música para las masas de una manera que nunca antes habían logrado.
Para muchos, "Songs of faith and devotion" fue un atraso, un disco demasiado lúgubre que no identificaba a los auténticos Depeche. Para otros, como fue mi caso, se convirtió en un album de cabecera, con 10 canciones pluscuamperfectas en las que apenas había cabida para el error. Les habría costado grabarlo, no veían el día de terminarlo, pero el resultado final fue ciertamente asombroso.
Julian Ruiz avanzaba en la presentación del disco, antes de que fuera editado, en exclusiva para la emisora de radio, una a una todas las canciones de fé y devoción. El oyente atento, como era yo, se quedó boquiabierto cuando llegó el momento de desvelar cuál era la balada de turno (tradicción que se ha mantenido fiel en cada trabajo de los ingleses) que interpretaba Martin L. Gore y que era algo que nadie podía imaginarse: un tema con el único acompañamiento de una orquesta de cuerdas, pero que podría incorporarse sin ningún problema en la banda sonora de una película de Drácula.
Por aquella época no entendía nada de lo que expresaba la letra, y con esas, el efecto en mí fue automático. Casi como una pieza clásica, el tema más olvidado de Depeche Mode pero casi de los que más magia tienen, "One caress" se hacía desde ese lejano día de 1993 como parte indispensable de mi memoria musical.
Ofrecía la eterna oscuridad en su mensaje, en el que no falta la admiración hacia la noche, la redención, la acusación, los pecados y el perdón. Los violines atraviesan las venas y ennegrecen tu corazón, las luces se apagan, el espectáculo va a comenzar. El súmmum es el estribillo final, en donde la orquesta aprieta pistones y se expresa solícita con toda la fuerza que ignorábamos podrían soportar. Encontramos algo nuevo en lo que era viejo, nos revitalizamos, las tinieblas se apoderan del entorno y basta una única caricia para que todas desaparezcan.
Hay un efecto mágico en esta canción, a la par que turbador. Debió haber sido un tardío sencillo del album (y no sólo publicarse en USA) y en cambio se quedó escondida como la gran joya perdida.
Curiosidad: "Songs of faith..." fue el último disco de la banda como cuarteto. Alan Wilder, el batería, abandonó tras varios conflictos con el resto, sobre todo con Dave.
Hace un día de mierda, pero el cuerpo me pide marcha y la pienso encontrar, jajaja. Llevo una semana horrible, el disco duro de mi pc se quedó atontado y todo lo que tenía lo he perdido, no he podido recuperar nada. Ha sido como la película de "Cementerio viviente", los archivos han revivido pero de qué forma!!
Y hablando de recuperar, hoy voy a desenterrar del olvido a Amanda Marshall, una chica canadiense que allá por mediados de los 90 tuvo algún que otro pequeño éxito y que desde el 2001, cuando sacó "Everybody's got a story", está más desaparecida que el cuerpo de Marta del Castillo (pobre chica, ande andará??).
De ese preciso disco quiero recuperar este "Sunday morning after", en el que habla de esas mañanas en las que te levantas y dices, ¿pero qué demonios pasó anoche?. No llegamos al extremo de Amanda, de encontrarnos un tatuaje de una serpiente o un piercing en la lengua, pero sí de tener unas lagunas impresionantes, y quizás amanecer con alguien de quién no nos acordamos cómo ha llegado allí.
Esta chica componía unas canciones realmente irónicas y ocurrentes, es una lástima que se la haya tragado la tierra. Ahora que vuelven todas las noventeras, esperamos que Amanda asome su cabellera rizada y diga que está viva.
Tengo muchas reliquias que desempolvar, así que preparaos. Ah! y el que sepa quién es Amanda Marshall tiene premio, porque conocerla es de nota.
Qué difícil está encontrar una foto de este hombre con camiseta.
Reconozco no ser seguidor de Iggy ni de los Stooges y también reconozco sentirme un tanto molesto ante la excesiva exhibición que prodiga Iggy, cuando no es que tenga un cuerpo especialmente bonito de ver.
Rebuscando en cds por aquí perdidos encontré una recopilación antigua de temas que había llamado "Beside you", y es que uno de los temas era éste de Iggy Pop, una de las pocas canciones que he escuchado de él, la cual me cautivó desde el primer momento.
Quizás el hecho de que llegara a mí por el videoclip tuvo mucha relación. Me encantaba ver esas imágenes en blanco y negro tan sugerentes, con tantos mensajes crípticos escondidos. Para presentar a Iggy se ven instantáneas de edificios derrumbados, fábricas herrumbrosas y seguidamente, una toma de Iggy. Creo que todo queda específicamente claro. Iggy, por supuesto con el pecho al descubierto, se retuerce en una diminuta cama, se conecta incesantemente con un pequeño aparato que dispone de una pantalla en la que aparece esa chica de mirada dulce y voz más dulce aún, que es la que suena en el estribillo.
"Beside you" habla de hambre, y así, las guitarras devoran, la melodía alimenta y el oyente no queda saciado. Busca a esa chica, es su obsesión, su amor se ha despertado por ella y ahora quiere encontrarla. El texto no es más que otra reflexión que añadir a la lista sobre hallar el amor anhelado y mirar alrededor comprobando que todos buscamos lo mismo, todos caminan hambrientos.
Hay que remontarse a 1993 para reencontrarnos con el "American Caesar", el disco que Iggy presentaba por aquel entonces. "Beside you" fue uno de sus sencillos y contaba con la carismática voz susurrante de Lisa Germano. Sin ceder un ápice de su registro, pero inclinándose al mainstream, Iggy dió de pleno presentando esta canción. No le falta autenticidad, es más, anda sobrada. Posee carácter, parece indomable y pronto apreciamos que esta fiera se puede acariciar. Con 13 años que yo tenía por entonces, veía a Iggy como un ser de otro planeta, con sus muchas arrugas repartidas por su musculoso cuerpo y moviéndose incesantemente como si recibiera compulsiones (por aquel entonces era muy ingenuo como para pensar en otros motivos). No me podía imaginar a un tío con ese aspecto cantando una canción tan delicada.
Seguro que a los seguidores de Iggy o de The Stooges no les atraerá mucho esta pieza algo menos abrupta de su discografía, pero no deja de ser una estupenda composición que utiliza la fuerza para demostrar la sensibilidad.
Nota: Repito, este video es de 1993 y por aquel entonces las conversaciones por webcam en Internet o cualquier otro contacto vía cámara era algo que no se daba. En la actualidad este video adquiere otro matiz, se ve como algo más normal, por aquel entonces lo veíamos como ciencia-ficción. Fue una de las primeras representaciones de amor virtual que se conocen, sin duda.
I been hungry way down in my heart waiting for a reason i been hungry like a lot of guys i want to be beside you
Beside you grey is turning to blue you wake up love in me beslde you everything is new you wake up love in me
I been hungry way down where it hurts waiting for a reason i been hungry like a lot of guys i wanna be beside you beslde you grey is turnin to blue you wake up love in me beside you everything is new you wake up love in me
What a world i really need you girl you wake up love in me
Beside you grey is turning to blue you wake up love in me beside you beside you i want to be beside you
Lo que a algunos se les ha negado (no quiero señalar a nadie, querida Duffy) parece que a otras se les ha concedido.
Adele va a arrasar con su segundo largo, "21", que lo más probable es que debute en lo más alto de las listas de ventas, y no sólo eso, el anterior "19" se aupará al top5. Pocos pueden alardear de tener dos discos en semejante posición.
No nos extraña, "Rolling in the deep", en el que Adele derrocha vozarrón, es un tema que está impresionando. Ya lo contábamos hace poco, se ha estrenado en el #2 de singles, y escuchándolo, toda buena aceptación es poca.
Tiene gancho, autenticidad y está interpretado con énfasis. La oronda Adele está rompiendo marcas y se agradece que una artista que no vende su cuerpo para llegar a las masas (Aguilera, va por ti) y que quiere que el personal se centre en su música, esté triunfando de esta manera. Los promotores que apoyan lo visual y nos meten sin parar bobaliconas cantantes con cara de calientapollas y que enseñan carne sin cesar, deberían replantearse sus bases, porque cuando hay materia de la buena, no hace falta exhibicionismo ninguno.
Aún nos quedan varios días para disfrutar de "Charm school", y seguimos emocionados con la vuelta de Roxette. Omitiremos ese video de aire cutre y el sencillo excesivamente comercial y pasaremos a los demás tracks, de los que ya se puede escuchar extractos de todas ellas. Se escuchan cosas muy interesantes, que a los fans de Roxette nos van a encantar. Hay su buena dosis de baladas, como esperábamos, que mientras no sean en español (qué disco tan malo, por Dios) iremos contentos.
El nuevo album de una banda muy prometedora, The Boxer Rebellion, ya se puede escuchar aunque su fecha de publicación es el 7 de Febrero. Ya nos agradaron con aquel "Union" que contenía temas de enorme calado, profundizando en el sonido brit rock que Coldplay, Keane y sucedáneos han practicado con autoridad.
Los Boxer no se quedan atrás. Han facturado un disco, de nombre "The cold still" que augura grandes momentos para los amantes de estos sonidos británicos. Producido por Ethan Johns y costeado por ellos mismos, editado de la misma manera que "Union", desde una compañía independiente.
El arranque, con "No harm", calmado y sinuoso, nos lleva al corte "Step out of the car" en donde podemos encontrarnos su marca de la casa. Guitarras potentes, baterías enfadadas y la inconfundible voz de Nathan Nicholson.
Entre estos dos temas, voy a decantarme por el primero, porque ofrece algo inusual en la banda, y que seguro, os impactará.
Recuerdo la época en la que andaba adicto a Guster, los discos producidos por Ron Aniello me traían loco. Me encantaba su sonido, su diversidad instrumental, la manera de presentar las melodías. Los primeros trabajos de Guster en los que Aniello no participaba me eran más indiferentes y en pleno convencimiento de que el productor aquí tenía mucha implicación, decidí investigar los trabajos paralelos de Ron con otros artistas.
Descubrí así a Shannon McNally, cuyo album "Jukebox sparrows" había sido producido por Aniello y tras preescuchar sus temas por Amazon decidí probar suerte y en el eBay, por dos duros, me lo compré.
Cuando "Down and dirty" empezó a reproducirse, se me vino a la cabeza Joan Osborne y su "Relish", y muchas canciones aquí toman de la misma ambientación neocountry-soul-pop como hacía la intérprete del tarareadísimo "One of us".
Shannon tiene una voz privilegiada, de r'n'b negro, de casta, bravura y empaque. Sabe qué es lo que tiene que cantar y cómo, sabe donde puede sobresalir, donde encontrar un sitio. No quiero llevaros a engaños, estoy hablando de un disco publicado en el 2002, y ni éste ni ninguno de los que vinieron después tuvieron la mínima repercusión en el mercado. La chica lo siguió intentando, concretamente según la Wikipedia, una seis veces más, pero lo más destacado en su trayectoria fue este "Jukebox sparrows", que a los adoradores de la música femenina con carácter y fuerza les encantará, si es que consiguen el disco. Yo os dejo por aquí un par de previews para poneros la miel en los labios.
"Now that I know" es una preciosa canción para regalar el día de los enamorados ;)
Ayer se puso a la venta "La joven Dolores", la esperada continuación de "Tu labio superior", que viene a demostrar el buen estado de forma de Rosenvinge.
12 temas nuevos que emanan sensibilidad y calidad y que si se hiciera justicia, deberían debutar muy alto en listas de ventas. Había mucha expectación con este nuevo trabajo, y así lo han demostrado la cantidad de peticiones que han llegado el día de su publicación para que se filtre. Y esta madrugada por fin lo hizo y podemos degustar su nuevo repertorio, donde "Canción del eco", un hermoso tiempo calmado con guitarra de más de seis minutos, da el pistoletazo de salida a lo que podría ser su mejor disco.
Christina suena más cómoda que nunca en su faceta de cantautora convaleciente que desgrana sus penas de hospital y sus dolores, bien llevados desde el nombre del álbum. Aún es pronto para encumbrarlo, pero semajente empiece ya pronostica que podamos estar ante el disco del año.
Esperamos verla, como poco en portada, del próximo número de Rockdelux o Go Mag.
¿Cuántos Paul Smith habrá en el mundo? Un nombre tan común debería intentar sobresalir con otros méritos no antroponímicos. Para aquellos que se estén preguntando quién es este tal Paul Smith y que mirando su foto os resulte familiar, os diré que se trate del frontman de la formación Maxïmo Park. El chico se sentía algo limitado por encasillarse en un estilo y ha querido experimentar con una nueva paleta de colores que no podía utilizar en la banda.
“Esta incursión en solitario potenciará a la banda. Si no hubiera sacado “Margins” me sentiría bastante frustrado. Y también creo que cuantas más cosas hagas en la vida, cuanto más abras tu mente, mejor música harás”.
Así responde Paul sobre el futuro de Maxïmo en una reciente entrevista para Go Mag. “Margins” se encuentra en eso, en los márgenes, entre el bien y el mal, si consideramos bien como el mainstream y el mal como la experimentación menos comercial. El chico quiere abarcar, confiesa que escribe melodías fáciles de recordar y que también le gusta añadir algún toque inusual a su música. Ya sabemos por experiencia que las medias tintas, la falta de definición provoca bastante rechazo entre el público, que necesitan algo con lo que definirse al 100%. Su aventura ha pasado por las listas de ventas con poquita repercusión, incluso los de Go Mag! liquidan el interrogatorio en media página. Se ha escuchado poco de Paul Smith así solito, y la gente puede pensar que reconocerle a él es como rechazar a Maxïmo Park. No es buen momento para los solistas que salen de bandas, que se lo cuenten a Fran Healy de Travis.
“Margins” nos viene envuelto de atmósferas intimistas en paisajes acústicos y calmados, que rememoran a Cat Power o Bill Callahan, y el caballero se atreve hasta con una samba en “This heat”, que según dice él, no tenía ninguna cabida en su banda.
Escucharemos detenidamente su disco a ver si lo de las ventas se trata de mala suerte y nula promoción o si hay chicha a la que agarrarse.
Si aún no has escuchado "High violet" de The National, no sé a qué estás esperando. Te lo agradecerá tu salud, tu familia, tus amigos, la vida será más hermosa. Ha sido uno de mis principales durante el 2010 (me lo acabé comprando en su edición doble a un precio de risa) y promete persistir en este año. Perdí la cuenta de las veces que lo he reproducido y aún con esas sigo descubriendo detalles nuevos que me sorprenden, sobre todo después de haber conseguido las letras, que no se incluyen en el CD.
Los de Go Mag lo han puesto en sus repasos de lo mejorcito del 2010 más alto que ningún otro medio. Sólo superado por Four Tet, incluyen una breve descripción de Albert Fernández que parece que estaba colocado de LSD cuando la escribió. Ni Lucía Etxebarría en sus más pastelosas líneas podría haber empezado esta minirevisión de forma más pedante y exagerada. Parece que hay mucho escritor frustrado al que no le queda otra que expresar su creatividad en una reseña musical.
Ahí va:
Las sábanas se vician y despiertas entre arañas. Cada noche la misma pose intacta, porque te ronda algo helado que no sabes describir, y te mantienes siempre del mismo lado de la cama. "High violet" retumba en el reproductor según te calzas las zapatillas, sin más aspiraciones que el café. El día es demasiado claro como para salir, y piensas que no puede haber nada impostado en esa nítida transmisión de dolor que te llega con "Afraid of everyone", que, ayudado por los arreglos de Sufjan Stevens, acaba por volver veloz el tránsito de las nubes y te empuja a refigiarte de nuevo en la cama, tanto más extraña como el día ya en marcha. Acostado, dándole la espalda, piensas que éste es uno de esos discos que no podrían aburrir o dejar indiferentes a nadie, aunque sabes que es muy probable que algunos caigan en un tedio incomprensible bajo los compases prolongados y grandilocuentes de "Little faith" o "Lemonworld". Pero a ti escuchar eso te duele de veras, te está jodiendo, está claro. En el centro de la ciudad, la gente se asusta, mientras sobre tu cabeza da comienzo la terrible danza de las gárgolas inmóviles, y la conjura definitiva de "Vanderlyle crybaby geeks" entierra las últimas notas de esta ceremonia llorona y lánguida. Ante un pozo tan profundo, te quedas sin saber dónde mirar.
Leer esta crítica produce miedo. Según parece, sólo los seres depresivos y solitarios, que no se enfrentan a sus pesadillas, son los que podrían disfrutar de este disco. Craso error. "High violet" no es que sea una comedia desternillante, pero dispone de la suficiente ironía como para no tomarse tan a pecho las palabras embadurnadas con pesar que pronuncia Matt Berninger. Sí que sus texturas nos evocan telarañas y grandes ciudades (las menciones a ellas durante el disco son sucesivas): Nueva York, Los Angeles, Ohio, Londres... Matt quiere situarnos en espacio y lugar, y si le apetece, se pone a cantar desde una catedral en Los Angeles.
No es un disco que duela, es un disco que cura heridas, más bien. Y si se les ha ido la mano en el dramatismo, lo arreglan con el "Vanderlyle..." y ese aura salvavidas que tiene, "Se lo explicaré todo a los idiotas".
¿Qué canción podría rescatar de "High violet"? A "Lemonworld" recuerdo no haberle prestado mucha atención, y ahora me apasiona, según comienza con su guitarra distorsionado emulando un motor de coche que no acaba de arrancar, y que cuando lo consigue lo acampaña todo el juego de luces, turbinas, batería y demás que es lo que forma la banda.
"So happy I was invited" es la frase inicial. Y así me gustaría hacer contigo, invitarte al "High violet". No te preocupes que no necesitarás Prozac.
PD: Sufjan Steven sólo colabora en los coros de "Afraid of everyone". No aporta más.
Superadas las coreografías sobre cintas para correr y los complejos engranajes que desprenden pintura, los OK Go se plantean otro video curioso (no ya tan original como para tener la repercusión de los mencionados) para su momento Death Cab for Cutie, la baladita de cantautor acongojado que es "Last leaf".
Doscientas quince rebanadas de pan tostado es lo que hace falta para rodar un clip. Eso y una Samsung NX100 (que ya de paso patrocina el video) a lo que se añade una historia animada que se reproduce sobre las rebanadas.
La canción nos ofrece una cara nueva de OK Go, más reposada, más para meterla en una escena de amor de "Anatomía de Grey", o en una peli de Sandra Bullock. Nos quedamos con el "This too shall pass" y ese huracán sonoro que soplaba. Mi cuerpo hoy me pide guerra, no paz.
Bruno Mars ya apuntaba maneras cuando nos presentó "Just the way you are", título que venía abalado por un gran éxito comercial en USA y que en Europa empezaba a aterrizar (en España todavía sigue siendo un desconocido).
Lo que no consiguió esa resultona tonadilla lo está haciendo "Grenade", su nuevo sencillo que lleva 2 semanas en lo alto de la lista de singles en UK y que ha ayudado a que el largo "Doo Wops & Hooligans" se ponga en el número 1, consiguiendo así el doblete, algo de lo que muy poquitos pueden presumir, y más siendo artista primerizo.
El nombre de Bruno Mars será uno de los que más se escuchen durante este 2011, la nueva sensación, el nuevo hype. Sólo está empezando a desplegarse su poder mediático.
Analizando en profundidad la lista de ventas del Reino Unido, comentamos que el triunfo de Mars y la persistencia de Rihanna ha evitado que White Lies debutarán en mejor posición, y se tienen que conformar con un #3, que con seguridad y una vez pasado el efecto "fan que no puede esperar y se tiene que comprar el disco ya" bajará algunas posiciones en lista.
The Decemberists, otra interesante formación indie, se estrena en el #24 con "The king is dead" y más arriba podemos encontrarnos un album de los llamados "pacer", que va subiendo poco a poco. Se trata del "Mayhem" de Imelda May, que se puede encontrar por menos de 6 euros en play.com.
En el #40 debuta otra novata, Anna Calvi. He escuchado algo de se presentación y puedo aseguraros que esta chica promete darnos muchas alegrías sonoras.
Sobre la lista de singles, algunas novedades importantes. "Hold it against me", lo nuevo de la Brisni se queda en el #6 (mal resultado para ser ella y tratarse de su regreso) mientras que la carismática Adele está recogiendo el triunfo que se le ha negado a la pavisosa Duffy. "Rolling in the deep" se estrena en el #2.
Si bajamos y bajamos y nos detenemos en el #29 vemos el novísimo "What the hell" de Avril Lavigne. No sabemos si conseguirá mejorar esa posición, pero si lo comparamos con el #1 de "Girlfriend" (que por cierto es peor tema que ésta nueva), podemos considerarlo un pinchazo en listas. Si la pobre Avril no quería cantarlo...
Recuerdo hace diez años cuando esperábamos nerviosos el nuevo disco de Natalie Imbruglia, el que iba a suceder al exitoso "Left of the middle" y que tantos años le llevó grabarlo. Anunciaron por entonces que ya tenían un clip grabado y que pronto se emitiría en televisión.
Llegó el día y todos esperando a que se pasara por canales como MTV, y no había rastro del "That day", primer sencillo de "White lillies island". Posteriormente se supo que ese video había sido rechazado, no recuerdo si fue la propia Natalie o la compañía la que dijo no estar satisfecha con el resultado y rápidamente grabaron uno nuevo, el clip que yo llamo "Caroline, ve hacia la luz".
Leo en un foro que han conseguido recuperar ese clip añejo que nunca llegó a emitirse. Es como retroceder al pasado, al año 2001, y volver a vibrar con Natalie y la parrafada incesante que suelta en "That day", la cual provocó que la compararan con Alanis Morissette.
El clip perdido no es que sea malo, tampoco una maravilla, si tuviera que elegir creo que hicieron bien regrabándolo, envolviéndolo en imágenes más oscuras, de Natalie tropezando con transeúntes que no la ven, o no quieren verla. Esa idea, precisamente es la que tiene en común con el primero. Natalie se desgañita en una cafetería cantando a un tío moñas y nadie la ve. La realización es realmente mala, con una sucesión de secuencias a cámara movida que llega incluso a marear. ¿Realmente era necesario grabarlo así y abusar tanto de primer plano? ¿Y qué sentido tiene la lluvia posterior? Ya nos hemos dado cuenta que "la gente no se entera", podían haber puesto que estallaba una bomba atómica, por si acaso no había quedado claro el concepto.
Hace poco nuestro compi bloguero MIDAS, conocido por su lengua viperina (¿o es la de su sobrino?) , nos recuperaba un nombre que hacía tiempo que no escuchábamos: Damien Rice. Intentando obtener algo de información sobre el paradero del susodicho, averiguamos que Damien se embarcó en Julio pasado en una gira por Albacete y aún le quedan pueblos por donde tocar, lo que le tendrá ocupado hasta finales de 2012. No, es broma… en parte. Sí que está de gira, aunque tocando los temas de sus dos únicos discos de mercado (¿no se cansará de tocar siempre lo mismo? Y por el Reino Unido, al menos eso aparece en su myspace. Eso sí, de nuevo material no hay ni la más mínima pista. Entre lo breves que hace sus grabaciones y lo que las distancia en el tiempo, va a parecer el Sade con guitarra y cara de pena.
Tenemos ganitas de algo nuevo del chico de al lado que nos engatusaba con su “The blower’s daughter”. Quizás debería reagruparse con los BellX1 (formación de la que salió en su origen) y aprovecharse de las estupendas ideas de Noonan y lo suyos, más activamente creativos.
Otro que parece haberle cogido gustillo a los escenarios y no se plantea grabar nada nuevo es otro Damien, esta vez irlandés y con aspecto de bulldog. El brutote de Damien Dempsey lleva 4 años sin renovar cancionero, y aún se le ve por Irlanda de club en club buscando el calor del público y con alergia a los estudios de grabación. Nunca había dejado pasar más de 2 años entre disco y disco y tanto tiempo parado nos extraña. Esperemos que con lo que sea que venga, la espera haya merecido la pena.
Esta vez en España tenemos a la banda mallorquina Sterlin, cuya web oficial lleva años sin actualizarse. No sabemos si se han separado, si se han ido a vivir a Australia o si les ha atropellado el camión de basura. Tampoco parece que estén muy activos en directo y si uno busca noticias sobre qué pasará con su futuro, un enorme vacío es lo que encuentra. Hasta sus seguidores en facebook, que se preguntan lo mismo que yo, que dónde narices se meten, no saben o no contestan. Su disco “Destroy” es de lo mejor que ha dado este país en los últimos cinco años y hay ganas de una continuación, o que al menos Adela Peralta se embarque en otra aventura y que no se olvide de la parafernalia musical.
Seguimos dando cobertura al regreso de Roxette, esta vez para traeros el clip del nuevo sencillo “She’s got nothing on (but the radio)”. Este ha sido el primer trabajo de Mats Udd, un director novel compatriota de Per y Marie. Me extrañaba mucho que Jonas Akerlund, habitual de la banda, estuviera detrás de esta cosa tan vulgar que han rodado, en el que incluso hay partes en que el playback no cuadra.
Aquí podemos ver mezcladas imágenes de una fiesta adolescente que se suceden sin un guión concreto, con otras del dúo en un fondo blanco en el que al menos se les ve disfrutando de volver a estar juntos ante la cámara. Como es obvio, mucho más mayorcitos, pero con mucha vitalidad, moviéndose muy bien. Lo que no se mueve nada bien es el ritmo de las secuencias, los planos no están acompasados con el sonido, no conectan entre ellos, no refuerzan la canción, incluso han incorporado imágenes como la de Marie tapándose la boca que cualquiera con dos ojos hubiera editado.
Parece que nos estamos resarciendo con Roxette y lo que está resultando un regreso de lo más irregular, y hablar así me duele. Más expectativas que tenía yo no las tenía nadie y confiaba en la capacidad compositiva de Per, que en los últimos años sólo ha brillado en el proyecto de Son of a Plumber.
Nos mantendremos atentos hasta el 11 de Febrero, que es cuando se publica “Charm School”.
Cass McCombs es un tipo introvertido. No suelta prenda en las entrevistas. Le cuesta hablar de sus influencias, de su estilo, de sus letras, de sus inspiraciones. Tiene un punto engreído o quizás sea pasota, él quiere mantenerse al margen de la cara pública.
No tiene complejos cuando admite que "Catacombs" está formado por canciones escritas hace varios años y que ha ido recuperando y actualizando, incluyendo finalmente las que más se ajustaban a su situación en el momento de la grabación.
Esto podría llevarnos a una idea equivocada: descartes pasados guardados con recelo en un baúl. Esto suena a material desechado, y sin embargo, escuchando el maravilloso album uno piensa: "Wow, si esto es lo que no quiso publicar, ¿cómo será el resto?".
Unos lo definen como sobrecogedor y esa palabra no se me ajusta a lo que oigo. Efectivamente, me sobrecoge, pero no me dan ganas de salir corriendo o mirarlo con pavor, sino todo lo contrario. El impacto que producen estas canciones es para abrazarlas, darles cariño e incubarlas en nuestras cabecitas. No es algo artificial, frío como un témpano de hielo, tienen el calor suficiente como para caldear una casa en este gélido invierno.
Su estilo es difícil de ubicar, algunos le relacionan con Roy Orbison, otros no rebobinan tanto y se van a Will Oldham, y los hay que lo meten en el mismo grupo que M. Ward. También tenemos los que se inventan nuevos términos para definirlo: post-nostalgia.
Si nos introducimos en el universo de la rotunda "Lionkiller got married", la deliciosa "You saved my life" (hacía tiempo que no me encontraba con una pedal steel tan bien entonada) o el primer sencillo, la hermosa "Dreams-come-true girl", no querremos salir nunca más de allí.
Su voz, algo aflautada, ligera y joven, se entremezcla con instrumentos clásicos del rock&roll, en melodías concisas y bien trabajadas.
No, no es un disco de sobras. Aquí hay comida de primera categoría. El chef es excelente y las catacumbas no son tan sobrecogedoras.
Por favor, escuchad este "Dreams-come-true girl" que tanto le debe a nuestro querido Roy Orbison y decirme si no suena maravillosamente bien.
Si John Grant se ha llevado tantas conmemoraciones con su debut en solitario, "Queen of Denmark", es por composiciones tan desgarradoras como "It's easier".
Pocas veces se presenta en un texto el dolor de una ruptura que se avecina, la amargura del adiós y cómo uno puede afrontar esa desagradable situación.
Como bien dice John, pensaba que estando con esa persona se podía comer el mundo. Tenía su amor, se creía merecedor de él, y decidió aceptar el riesgo que conlleva enamorarse y entregarse a alguien. Lo duro es cuando tus sentimientos afloran, empiezas a construir esa relación incondicionalmente y de buenas a primeras te dicen que quiere ser libre, que no quiere estar contigo.
Lo sabe, te hubieras mostrado leal y auténtico, le hubieras dado todo lo que quería, y con lo que cuesta alcanzar ese estado, subir hasta ese piso del edificio, te das cuenta que te tienes que bajar. Y no por las escaleras, sino que te tiran al vacío desde una ventana.
Así que es más fácil pensar que todo lo que te decían era mentira. Cuando decías que te quiero, que me necesitas. Mejor continuar con nuestra vida, alejándonos de lo que tanto hemos amado. Mejor si desde el primer momento hubiera creído que esto pasaría, que algún día me abandonarías.
John encuentra las palabras exactas para describir su pesar. Le han dejado tirado, como quien deja un perro en una cuneta. Parecía que me querías tanto y aún así prefieres seguir sin mí. Comenzamos a analizar: ¿En qué nos hemos equivocado? ¿Hemos actuado mal? ¿Dije algo de lo que me debo arrepentir?. John está orgulloso, como nos ha pasado a todos. "No me arrepiento de ninguna cosa", contempla en el bridge. "Lo que está hecho está hecho".
"It's easier" es de esas canciones que te llegan al alma porque hay gente así, sin alma, con el corazón atrofiado. Parece que lo entregan todo y un día se levantan con el pie izquierdo y te dicen adiós. Mejor creer que estaba fingiendo todo ese amor y que nos han engañado como a chinos.
Es enorme su capacidad emotiva en la interpretación, como podréis apreciar. El estribillo es el escudo, su arma para luchar en la guerra. Por lo que su voz melancólica sube un tono, y se crece levemente. El hammond, tan en boga en los 80, es la comparsa a una situación insostenible.
La canción adquiere matices particulares si consideramos que trata sobre una relación gay. John admitió tranquilamente en una entrevista reciente sus inclinaciones sexuales. Eso nos daría para un largo debate sobre la frivolidad de los sentimientos que se vive en el mundo gay, pero eso es otra historia.
Hay que remendar un corazón roto, es más fácil pensar que todo fue mentira.
I don't know who I thought I was I guess I tried to love you, because I thought I could afford To take the risk and take a chance I do not know who I thought I was fooling I must have felt invincible in your arms, like I could take the whole world on
But it's easier for me, to believe that you are lying to me, when you say you love me and when you say you need me, yes it's easier for me to walk away and get on with my life If I believe that you're deceiving me, if I believe that you'd be leaving me one day, be leaving me one day
I wish that I could make you see, but clearly that is not to be, 'cause you will not be swayed by me, you've made it clear, you must be free, I would have sacrificed for you, I would have been so loyal and so true, but gifts this precious can't be offered up by fools
And it's easier...
What's done is done, I cannot change the way I feel, and what's more I am certain that I don't regret a single thing, but sometimes I really miss your sweet sweet love and wish that I'd wake up and this would all be just a dream
La madurez musical de Avril Lavigne parece que se está produciendo en orden inverso. Si hubiera empezado cantando tontadas como "Girlfriend" o el nuevo "What the hell" y hubiera evolucionado en "I'm with you", "Nobody's home" o "Complicated", todo tendría mucha más lógica.
Si "The best damn thing" ya era chirriante, parece que la continuación también da ganas de tirarse de los pelos. A los adolescentes les encantará la Avril petarda y poppy en la que se ha convertido, que ha pasado de ser una punk pija a una pija redomada. Se ha ido haciendo mujer, más femenina y más... del montón.
En la revista Shangay ya decían que "What the hell" recordaba a una de sus mejores canciones, "Girlfriend", que para mí es de las peores, sin mencionar el horrible video que lo acompañaba. Dice mucho del gusto de los que redactan las noticias para este medio (que por cierto alaban como nadie el nuevo hit de Britney, el cual aquí hemos recibido con frialdad).
Nos tendremos que olvidar de la Lavigne que era capaz de vestirse de indigente para un clip o aquella que paseaba sola en una fiesta adolescente. Esta Avril quiere un trozo del pastel de Katy Perry, Kesha y demás y lo hace adaptando su estilo. El nuevo sencillo recuerda a canciones del primer álbum de Katy y se olvida de que en los inicios, Avril parecía más auténtica y trascendental.
Para consumo rápido, enviada directamente al fast food.
Ayer estaba viendo la película de Ferzan Özpetek "Tengo algo que deciros" (muy floja, por cierto) y había una escena que me vino a la memoria ahora que estaba viendo el nuevo clip de PJ Harvey, "The Words That Maketh Murder". La señora de la casa está sentada en la cama y se queda mirando fijamente a su criada, a su lado, y muy seria le dice: "Teresa, qué fea eres".
Precisamente eso he pensado en ver a la delgaducha de Polly Jean: "qué fea eres, pero qué gran talento tienes, cabrona".
Su "Let England shake" aún no está en tiendas ni se ha filtrado, y revistas como Q o Mojo le han dado 5 y 4 estrellas respectivamente, por lo que ya podemos decir que se trata de uno de los discos del 2011, el primer grande que se publica.
Reticente a tanta alabanza, pensaba que era otra exageración de estos medios y tengo que admitir que "The Words That Maketh Murder" me ha dejado estupefacto. Suena deliciosamente atrayente, tiene un ritmo pegajoso, un estribillo retorcido pero acaparador, y de nuevo con la colaboración de John Parish (al que se le puede oir en los coros), consigue sólamente escuchando el sencillo que las buenas críticas recibidas estén más que justificadas.
Once discos a las espaldas y continúa haciendo una música increíble, por encima, mal que me pese, de coetáneas como Tori Amos. Que tiemble Inglaterra!!
La música de referencias cristianas siempre me ha dado algo de repelús, he de admitirlo. Tanta referencia al Señor, que si acerquémonos a él, si es nuestro salvador, que es la luz que lo guía todo... me llega a parecer algo enfermizo, pero cada vez voy entendiendo más a la gente que encuentra una inspiración grandiosa en Jesús.
Hay grupos como Out of the Grey, que me agradan bastante, o cantantes como del que voy a hablaros, Brandon Heath, a los que les gusta jugar con la ambiguedad en sus textos. Esto es, lo mismo podrían estar hablando del Señor que de un amor de carne y hueso que adoran. Así, cuando dicen "Mi vida no sería lo mismo sin Ti", uno puede decantarse por la opción que más le guste, y desprenderse de esa etiqueta religiosa que todo lo impregna.
Brandon Heath es un chavalote de buen ver que como dice en su canción, "Wait and see", nació en Tennessee a finales de Julio de un año cualquiera. Sus padres se divorciaron cuando él tenía sólo 3 años, y más tarde en el instituto se refugió en el Señor para encontrar las respuestas a la vida y superar el rencor que guardaba hacia sus padres.
Ahora publica "Leaving Eden", un disco de receta mejorada que se amplía en sentimiento, y que continúa el iluminado trazado que ya se atisbaba en "What if we", su segundo trabajo, que fue nominado inexplicablemente a los Grammy como "Mejor disco Gospel", según la Wikipedia.
No, este chico no va de Gospel, es más bien un pop facilón de línea amable que intenta agradar a los devotos y a los que disfruten de melodías tiernas que se facturan con una elegancia exquisita.
Acerquémonos a Brandon y a todo lo que nos propone, y si eres creyente, tendrás un motivo más para aproximarte. Si no, yo me considero agnóstico, te encontrarás con unas bonitas canciones muy bien interpretadas y con una calidad intachable.
“No me gusta decir que éste es el mejor disco que hemos hecho porque todas las bandas dicen lo mismo y suele ser una porquería, pero siento que todas las canciones son totalmente geniales. El álbum tiene cosas hermosas, algunas que te parten el corazón y también algo de rock ruidoso y todo lo que está entre medio. Tiene un sonido muy clásico”
Esto es lo que dice REM de su próximo lanzamiento discográfico, y los que leyeron las noticias que iban saliendo del anterior "Accelerate" sufrirán un dejavu, ¿esta no es la misma parrafada que soltaban hace un par de años cuando editaron ese disco? Los primeros que están repitiendo el discurso son los cronistas, que dicen que es una vuelta a las raíces, que si los REM guitarreros, que si tu tía la del pueblo... A mí me dan ganas de bostezar. ¿Cuántas veces vamos a estar escuchando la misma historia? El regreso de REM a los orígenes se vuelve a producir una vez más, así que parece que estos chicos no acaban de regresar.
Lo gracioso es el arte que tienen para caer en el cliché, "no queremos decir que este es nuestro mejor disco...". ¡Pero si cada vez que sacáis uno nos venis con lo mismo!. Todavía recuerdo una entrevista a Peter Buck que decía que "Accelerate" era lo mejor que habían hecho en mucho tiempo, que habían vuelto al sistema de grabación antiguo, sin tanta premeditación, tomando de la improvisación.... bla,bla,bla, dos años después nos da la misma charla.
Es lo que tiene llevar tantos años de carrera, que uno no sabe qué inventar para promocionar sus discos, y ya repite constantemente las mismas tretas, y como están mayores no se acordarán que era lo mismo que decían poco tiempo atrás.
Independimiente de la falta de memoria que tengan, las nuevas canciones filtradas suenan francamente bien, con un sonido a lo "Accelerate" (es una continuación, que se dejen de gilipolleces) y destaco el "Mine smell like honey".
"Collapse into now" se llama el disco y "Oh my heart" es el tema en el que colabora Eddie Vedder. Veremos cómo es el resto, pero parece que vamos a estar contentos.
Hubo una época que devoraba todo lo que tocaban Love of Lesbian, y por supuesto, no dejaba escapar las colaboraciones de Santi Balmés, como el dueto con la formación "Los seis días". ¿Se trataba de una doble de Amaral? En "Te odio", su timbre nos resultaba vagamente familiar. Hay que escuchar íntegramente su primer trabajo, "Lunes", para darse cuenta que a Los Seis Días no le falta el domingo.
Los etiquetan de indie pop y esa extravagancia y ganas de acoplarse a un mercado no es más que el recurso que usan para no quedan en tierra de nadie, sin derecho a voto. La cruda realidad es que es así, ni son lo suficientemente alternativos como para colgarles el sello indie ni se les podría incorporar en el mainstream al no sonar lo políticamente correctos.
En mi devoción por Love of Lesbian (hasta que me decepcionó su directo en el "Circo Price") tardíamente encontré a esta banda, por lo que ahora, se me antoja precipitado este segundo disco, de nombre "Jueves".
Y qué mejor día que un jueves para presentarlo: Producido por uno de los mejores productores del país, Suso Saíz, se compone de 11 canciones originales de las que "Demasiado sentimiento" hace la presentación como sencillo. No le he podido dar una escucha entera, pero "La descarada" abre el disco prometedoramente, lo cual es contradictorio cuando uno conoce "Demasiado sentimiento", un tiempo lento sin gancho claro, con una lectura retorcida y atmósfera lúgubre. "Hazme lo que quieras" o "Globos aerostáticos" formaron parte de mi banda sonora para el 2010 y espero que estas nuevas grabaciones lo hagan en el 2011.
Conocía de este proyecto paralelo de Tim Rice-Oaxley, teclista y compositor de Keane y para esta ocasión, además frontman, pero no había escuchado nada de ellos. Leyendo las buenas referencias que aquí recogemos dan ganas de darle una escucha, y no creo que eso del country-western sea demasiado arraigado. Que todo puede ser, pero esta gente involucrada en algo así, tan lejano a su estilo, se me hace raro de imaginar, y quién sabe si será eso lo que les ha unido, probar nuevos sabores que sólo así se atreverían a hacer, bien arropados.
Neo Country. Tan de actualidad como están hoy en día las superbandas – ahí tenemos algunos ejemplos, más o menos cercanos, estilísticamente hablando, a MT. Desolation como Monsters of Folk o Tired Pony (sensacionales estos últimos) – no nos debe asombrar, en absoluto, descubrir en los créditos de este álbum de título homónimo, a una constelación de músicos de bandas reconocidísimas tales como Tim Rice-Oaxley, teclista de Keane, Ronnie Vannucci, batería de The Killers, Country Winston Mashall, de Mumford & Sons, John Roderick guitarra y voz de The Long Winters y Tom Fiddle Hobend, de Noah & The Whale. Lo que sí puede sorprender un poco más es que el resultado final de esta asociación dé tan buenos frutos. Aquí encontramos diez temas bastante más que notables en calidad, magníficamente interpretados y producidos, que muestran, sin rubor alguno, su pasión confesa por el sonido country-western, de la cual son ejemplos claros “Departure”, la morriconiana “Bridal Ford” o “State of our affairs”. Yiiihaaaa!
Este es el primer sencillo, "State of our affairs", una lentísima canción de las que cuesta cogerle el cariño. De primeras me ha aburrido todo, el tema, el video, ver a Tim Rice que parece que le falta la boina... Esperemos que el resto del disco vaya por otros derroteros, porque si no es perfecto para dormir a la abuela.
Las dos revistas musicales nacionales con más tirada del país, Rockdelux y Go Mag, no cesan en elogios hacia sus artistas catalanes y se les nota lo orgullosos que están de sus vecinos de comunidad. Incapaces de alabar a personal del mainstream como Nena Daconte o Amaral, son capaces de describir como hermoso e inspirador un disco de Astrud en el que sólo suenen pedorretas, si se diera el caso. No decimos que no sea así, y la descripción que ofrecen de “Lo nuevo” realmente incita a su escucha, pero de ahí a decir que siguen siendo los reyes del “mambo” solamente por la incorporación de dos temas nuevos, hay un largo tramo.
No en vano, en sus selecciones de lo mejorcito del año, estos medios siempre se acordarán de los discos en catalán y si mencionan a Eva Amaral es únicamente cuando a la chica le da por colaborar con Juan Ignacio Lapido, pero nunca por sus discos como artista propia.
El pop de Astrud es de categoría, eso es indudable y que hubieran alcanzado la fama con una canción tan fuera de corriente como era “Todo nos parece una mierda” se puede considerar un logro, pero en los textos de Astrud podemos encontrar referencias acertadas y otras, en mi humilde opinión, algo tontas, y sin ir más lejos, las que ellos realzan en la crítica adjunta, me parecen tontorronas. La voz de Gínes es para algunos chirriante y molesta, y sin embargo, a los alternativos les encantará, y alabarán el hecho de que como participante en Operación Triunfo no supere ni un casting de pueblo. Yo soy de los que piensa que todo cuenta, y si tu timbre de voz no dispone de registros suficientes y te limitas a cantar casi como a charlar, ése es un factor que te perjudica, pero claro, eso las revistas especializadas no lo valoran. Cantar bien no debe ser un valor en alza por aquí, es más, si te limitas a permanecer en la misma escala, te lo agradecerán.
Os dejo la crítica de Go Mag sobre “Lo nuevo” de Astrud: Pop de cámara. Éste no es un recopilatorio al uso. Ni siquiera es un recopilatorio. No contiene temas de “Performance” y sí muchos de “Tú no existes”, uno de los discos inexplicablemente menos populares de Astrud. “Lo nuevo” demuestra que Astrud hacen siempre lo que les sale de la brenca y que, además, casi siempre les va a salir bien porque, chico, el genio se nace, no se hace. Concebido como una manera de capturar para el recuerdo la gira que los llevó por todo el territorio nacional a reversionar sus canciones junto con el Col-lectiu Brossa, “Lo nuevo” vuelve a situar al dúo en el trono del pop patrio y lo hace con sólo dos temas nuevos (para mayor ironía). “Lo popular” abre el disco con unas cuerdas soberbias y con versos lúcidos y devastadores marca de la casa. Véase la referencia a “las chicas que cantan lo de My Chemical Romance mientras esperan en la puerta del Corte Inglés” (¡¡fan!!) o la reflexión que sirve de estribillo, “Por qué lo viejo es lo nuevo y lo culto, popular. Yo ya lo he comprendido…”. Así empieza el disco, con un homenaje al “Brossa” Adriá Gandia en forma de joyita de pop de cámara. Y se cierra con otro tema inédito, también un homenaje a otro miembro del Col-lectiu, esta vez a Marc Casas, en la juguetona y extravagante “La música de las supercuerdas”, que el propio Genis definió en su reciente entrevista con Go Mag “lunática y de culto”. El epíteto inmensos no alcanza a expresar lo grandes que están Astrud en estos dos nuevos ejercicios, que esfuman de un plumazo todos los miedos de que el genio o las ganas de Astrud se hubieran apagado para siempre.
Pero lo grandioso de este disco es que no necesita de las novedades para ser fascinante. La revisión que hacen de sus temas es absolutamente exquisita y radicalmente sorprendente. Fuera los sintetizadores, fuera los artificios digitales, aquí Manolo y Genís se rasgan las vestiduras tecnopop de que venían acompañando a sus letras y dejan al Col-lectiu Brossa hacer y deshacer con instrumentos tan poco usuales en su trayectoria (la de Astrud, claro está), como el violín, el chelo, la marimba, el vibráfono, el acordeón o la zanfona. Así, “Noam Chomsky” se convierte en algo parecido a un tango, unas cuerdas zumbonas a lo Rimsky-Korsakov sustituyen a la base eurodance original de “La boda”, los teclados de “Minusvalía” se transforman en marimbas caprichosas y frenéticas, la descacharrante “El vertedero de Sao Paolo” se parte por la mitad con un acordeón… Como es lógico, las canciones que originalmente eran más acústicas y orgánicas son las que menos impactan de entrada.
Por fin se da a conocer el nombre del quinto disco de mis adoradísimos Elbow, y además, se puede escuchar el nuevo sencillo llamado “Neat Little Rows”, que así de primeras me recuerda a ese sonido oscuro que se marcaron en "Cast of thousands".
Es su oportunidad de hacerse con el ansiado #1 en UK, por el cual llevan luchando varios años y que tras el enorme éxito de "The seldom seen kid" se les ha puesto más al alcance que nunca.
Ya podemos anunciar que los indies amarán la propuesta, y los que abrazaron el candor de "One day like this" se verán indecisos. Si atinan con la semana de publicación, lo aseguramos, el número 1 es suyo.
Build A Rocket Boys! Tracklist: 01. Lippy Kids 02. The Birds 03. With Love 04. Neat Little Rows 05. Jesus Is A Rochdale Girl 06. The Night Will Always Win 07. High Ideals 08. The River 09. Open Arms 10. The Birds (Reprise) 11. Dear Friends
Lo que creíamos casi imposible será una realidad: Noel Hogan, guitarrista de la mítica banda irlandesa The Cranberries (símbolos de toda una generación como la mía) ha informado a través de su cuenta de Twitter que están mirando fechas para entrar a grabar un nuevo álbum de la banda.
Por ahora Dolores aparca su andadura en solitario y la serie de conciertos que les ha llevado por todo el mundo parece que les ha despertado el gusanillo de aumentar su discografía, que desde el "Wake up & smell the coffee" hace nueve años, no crecía.
Tendremos un espléndido año de regresos: A Roxette y No Doubt hay que sumar ahora The Cranberries y para celebrarlo, recordaremos una de sus más hermosas composiciones: "Linger".
Aprovechando el lanzamiento de un recopilatorio de Vanessa, que al menos han tenido la decencia de llamar “The best of: ICON” y no “Greatest hits”, quería recuperar una de esas canciones que aquí se incluyen, que se editó como sencillo, pero que como el resto de la carrera de esta chica, pasó desapercibido.
¿Hay vida más allá del “A thousand miles”? Pues por lo que nos ofrecía el “Heroes & Thieves”, considerado para muchos, y para mí también, como su mejor trabajo hasta la fecha, parece ser que sí, todavía tiene cuerda para rato.
Chicas con aspecto lacónico, que se aferran a una guitarra o a un piano, que hablan sobre el amor en canciones amables y facilonas, hay miles. Vanessa puede parecer una más y su repertorio no ha tenido la consistencia necesaria como para que sobresalga del resto, aunque nos ha dejado unas cuantas tonadillas para aglutinar un correcto recopilatorio.
En sus tres largos, los singles brillan con luz propia, y por lo demás, quizás no así en el tercero, no nos sentimos especialmente atraídos.
“Hands on me” es una de sus más sobresalientes aportaciones musicales. Segundo single de su último disco, venía precedido de un hermoso pero algo anodino “Nolita’s fairytale” el cual precisaba de paciencia y dedicación, y sin embargo “Hands on me” te deja embobado desde la primera escucha.
Instrumentalmente es envolvente, no falta un piano sutil, unas cuerdas que revolotean y unos coros vigorizados. El estribillo es el mejor reclamo que posee, con esa letra de “mira por todo lo que hemos pasado”, en el que se mezclan confusamente datos de primeros encuentros en videoclubs con indicaciones a las generaciones venideras que hablarán sobre esa relación.
Tanto quiere abarcar en unas pocas líneas que no sabemos si habla de un “cuelgue” (crash) del momento, de lo mucho por lo que ha pasado con su pareja, de lo que les queda por pasar… Si no te crees lo que dice, lo mejor será que pongas las manos sobre ella. Sin tanto analizar lo que dice o deja de decir, me impresiona la melodía y ese buenrollismo que me transmite. Su escasa duración, no llega a los tres minutos, la hace quizás algo compactada, como que se han pasado con la edición. Sobre todo si tenemos en cuenta que tiene hasta un puente, y el estribillo varía en la parte final. Hubiera estado bien darle un minuto más al tema, para hacerla más consistente y de paso, haber enlazado mejor lo que se quiere transmitir con la letra, que lo deja a la imaginación del oyente, sin un objetivo claro.
Nos tendremos que creer lo que dice.
PD: Chisme!! buscando fotos de la nena, me encuentro con que recientemente ha admitido su bisexualidad. Estar con maromos como Stephan Jenkins o John Mayer parece ser que no han acentuado su heterosexualidad sino todo lo contrario.
¿Alguien ha escuchado algo de lo último de Maroon 5? ¿Sabíais que habían sacado un tercer disco? Probablemente no, porque ha pasado con muchísima pena, y qué hace Adam Levine para seguir alimentando ese ego exhibicionista que tiene? Pues despelotarse, según dicen, por una buena causa. Estas fotos seguro que crearán más expectación que su reciente trabajo llamado... ¿y qué más da como se llame?
Este mes la revista MOJO incluye un cd la mar de interesante: el "Harvest" de Neil Young vuelto a grabar por 10 artistas contemporáneos que rinden tributo al canadiense de una manera excepcional.
Gratamente uno se va reencontrando con los diez cortes, en la original posición de la obra, pero esta vez en diversas voces, femeninas y masculinas y con unos arreglos que rozan lo extravagante hasta lo más fiel.
MOJO ha querido seleccionar con la ayuda de muchas caras conocidas en la música, los 50 títulos más representativos de la carrera de Neil Young, y para conmemorar este atrevimiento pidieron a varios nombres que se marcaran su propia versión de un tema de "Harvest".
Así vemos cómo Jane Weaver esboza ese número 1 en USA que fue "Heart of gold", o que Danny and the Champions of the World liquidan los arreglos de cuerda para desnudar "A man needs a maid" únicamente con un piano. Kelley Stoltz imita magistralmente la voz de Neil en el título que da nombre al disco y Villagers se simplifican para su "Old man".
Smoke Fairies, un dúo femenino del cual ya hemos hablado en este blog, visitan el "Alabama" y los Phosphosrescent se animan con el fabuloso "Are you ready for the country?".
Este cd, de poco más de media hora, como duraba el original, es una propuesta que realmente merece la pena conseguir, si eres un fan de Neil Young y de la que para muchos es su mejor obra.
Repartidos por el artículo tenéis tres de los cortes que podréis encontrar en este cd.
Ya se han dado a conocer los nominados para la nueva edición de los Brits, y aventurándonos, vamos a hacer una quiniela (los marcados como <<<< serán nuestra apuesta). Esperamos las vuestras!!
British Male Solo Artist Mark Ronson Sony Music Paul Weller Universal Music Plan B Warner Music <<<<< Robert Plant Universal Music Tinie Tempah EMI Music
British Female Solo Artist Cheryl Cole Universal Music Ellie Goulding Universal Music Laura Marling EMI Music <<<<<<<< Paloma Faith Sony Music Rumer Warner Music
British Breakthrough Act Ellie Goulding Universal Music Mumford & Sons Universal Music <<<<<<< Rumer Warner Music Tinie Tempah EMI Music The XX XL Beggars
British Group Biffy Clyro Warner Music Gorillaz EMI Music Mumford & Sons Universal Music <<<<<<<<< Take That Universal Music The XX XL Beggars
British Single Alexandra Burke ft Pitbull All Night Long Sony Music Cheryl Cole Parachute Universal Music Florence & The Machine You’ve Got The Love Universal Music Matt Cardle When We Collide Sony Music Olly Murs Please Don’t Let Me Go Sony Music Plan B She Said Warner Music <<<<<<< Scouting For Girls This Ain’t A Love Song Sony Music Taio Cruz Dynamite Universal Music Tinie Tempah Pass Out EMI Music The Wanted All Time Low Universal Music
MasterCard British Album of the Year Mumford & Sons Sigh No More Universal Music <<<<<<<<< Plan B The Defamation of Strickland Banks Warner Music Take That Progress Universal Music Tinie Tempah Disc-Overy EMI Music The XX XX XL Beggars
International Male Solo Artist Bruce Springsteen Sony Music Cee Lo Green Warner Music David Guetta EMI Music Eminem Universal Music Kanye West Universal Music <<<<<<<<<
International Female Solo Artist Alicia Keys Sony Music Katy Perry EMI Music Kylie Minogue EMI Music Rihanna Universal Music <<<<<< Robyn Universal Music
International Breakthrough Act Bruno Mars Warner Music <<<<<< Glee Cast Sony Music Justin Bieber Universal Music The National XL Beggars The Temper Trap Infectious
International Group Arcade Fire Universal Music <<<<<<< Black Eyed Peas Universal Music Kings of Leon Sony Music The Script Sony Music Vampire Weekend XL Beggars
International Album Arcade Fire The Suburbs Universal Music Cee Lo Green The Lady Killer Warner Music Eminem Recovery Universal Music <<<<<<<<< Katy Perry Teenage Dream EMI Music Kings of Leon Come Around Sundown Sony Music
Critics’ Choice Jessie J Universal Music (Winner) James Blake Universal Music The Vaccines Sony Music
British Producer Ethan Johns <<<<<<< John Leckie Markus Dravs Mike Pela Stuart Price
Esta entrada va dedicada especialmente a aquellos que se quedaron anclados en el pasado diciendo que no se sigue haciendo música igual de buena. A aquellos que adoran a The Beatles y a Beach Boys, añorando sus viejas grabaciones, pensando cuánto darían por material nuevo de ellos.
Como hemos defendido varias veces desde este blog, hoy por hoy se sigue haciendo música cojonuda, y sigue habiendo grupos que han sabido recoger bien el testigo de estas bandas, pero por la poca repercusión que alcanzan y en los tiempos que corren, donde triunfa la sensación automática, no se hacen más conocidos de lo que son.
Voy a daros dos ejemplos claros para los que echen de menos a Beach Boys. Dos bandas desconocidas que han publicado disco en estos últimos años y que, por lo que podréis escuchar, no tienen nada que envidiar al sonido californiano playero que tan bien identificaba a Brian Wilson y los suyos.
THE EXPLORERS CLUB
Seis tíos del sur de California que no se averguenzan en ceder su propia identidad para que les comparen con sus mayores ídolos: The Beach Boys. En el 2008 publicaron "Freedom wind" en el sello Dead Oceans y el único single que les dejaron editar fue este pegajoso "Do you love me?", el cual tiene una armonía irresistible. Huele a hierba al sol y a salitre. Entran ganas de disfrutar de la vida.
PUGWASH
Esta vez nos quedamos en Europa. Desde Dublín, y con cuatro discos a sus espaldas, estos eruditos de Brian Wilson intentan ser lo más dulces que pueden, y así lo cantan en "Nice to be nice". Les han relacionado con la ELO y con Jeff Lyne, y claro, con sus amados Beach Boys, de los que también son unos dignos herederos, con sus hermosas canciones pop estupendamente interpretadas.
Así que quien se sigue quejando es porque quiere, y si después de haberlos escuchado sigue en sus trece, es que aparte de perder la memoria ha perdido el oído.
1 estrellita es lo que los de Q han dedicado al disco póstumo de Michael Jackson, hecho con lo olvidado, lo descartado, lo que no era suficientemente bueno y lo que nunca se pretendió publicar. 10 piezas terminadas después de su muerte lo cual no ha hecho más que levantar una gran polvareda de detractores al respecto. Incluso nuestro "querido" will.i.am, de los Black Eyed Peas, el cual también tiene en su poder material inédito de sus sesiones con Jacko, lo ha tildado de irrespetuoso y ha afirmado que él lo va a dejar tal como está, en honor a Jacko. A ver cuántos ceros hacen falta para convencerle.
Otros dicen que "Breaking news", uno de los temas, ni siquiera está cantado por Michael, sino por un impostor. La polémica está servida.
Para empezar, el hecho de que en vida jamás hubiera referido uno de sus discos con su propio nombre, hace pensar en la poca fiabilidad del proyecto, llamado "Michael". Después tenemos descartes de hace casi 30 años, en la época Thriller, que si el rey del pop ha querido mantener ocultos todo este tiempo no será por capricho personal, sino que los consideraba demasiado pobres para ser editados. Estamos hablando de "Much too soon", terminada por John McClain.
Los de Q repasan su trayectoria en solitario y la dividen en dos fases, siendo el punto de inflexión el "Dangerous", empezando aquí la seria decadencia. Quizás, si estuviera vivo, la desesperación de la situación que atravesaba entre las demandas por abusos a menores y su declive financiero le habría llevado a publicar él mismo estas canciones, porque que sepamos, no había pronóstico de material nuevo más allá de la gira de "This is it".
Mucho se especula del tema, y varios han ayudado a parir este disco, entre ellos 50 Cent en un cameo en "Monster", Lenny Kravitz desempolva el "(I can't make it) another day", en el que también Dave Grohl mete la batería.
Para Q los temas son, en una palabra, horribles y sólo salvan de la quema "Behind the mask", el cual es el único que podría incorporarse a un legítimo disco de Michael. "Best of joy" se lleva el premio al peor corte en el que destacan el párrafo "I am forever" y "Hollywood tonight" no mostraba la calidad suficiente como para entrar en "Invincible" y eso lo dice todo.
Subrayan momentos de inspiración, como el característico "(I can't make it) another day" donde su voz se explaya, la inyección de electricidad que 50 Cent aporta a Moster, la coda de piano de "Hold my hand" o el coro que comienza en "Hollywood Tonight", pero sólo son momentos, muy puntuales, que no hacen grandes las canciones.
El problema aquí no es que se esté manchando la reputación y memoria de Michael, porque como hemos discho, él era perfectamente capaz de haberlo hecho por sí mismo, sino que simplemente "Michael" no es lo suficientemente bueno.
