Cuando dejó de cantar el loco, apareció David Otero en forma de pescado y muchos nos quedamos enganchados con su propuesta, a pesar de no ser nada lógica.
Resulta sorprendente que David, escuchando sus últimas propuestas, viendo sus continuas apariciones en televisión, y conociéndole un poquito más, haya formado parte de una banda con Dani Martín durante tantos años. Les tuvo que costar encontrar los puntos en común, porque David se ha decantado por un pop luminoso pleno de referencias a la música más pop intrascendental de los 80 (no en vano su último disco se llama "1980") mientras que Dani, que anda un poco perdido del mapa en los últimos años, intentara ir más de serio y se perdiera en el intento.
En el disco debut de David como El Pescao, podíamos encontrar dos canciones muy grandes, que además aparecían una tras la otra, "Castillo de arena" y "Me da lo mismo", en las que demostraba que con un poquito que se esforzara, tenía cosas muy interesantes que decir.
O con "Una vez más", de su anterior trabajo. Esta canción, sólo por ese ritmo frenético, debería de haber pasado a clásico instantáneo.
El problema de Otero y que podemos apreciar en "Gira", su nuevo sencillo, es que como letrista, deja mucho que desear. "Y algunos días sale el sol, y otros me encuentro un poco raro", que suena en el estribillo, ya nos hace fruncir el ceño... No, las rimas no son lo suyo.
Si cuidara más este aspecto, podría llegar a ser uno de los grandes de este país, que aunque con su disco homónimo consiguiera unas muy aceptables ventas en nuestro país, no ha llegado todavía a consolidarse. Y repito, le falta consistencia a su mensaje, que amplíe su vocabulario (a ver si en alguna canción es capaz de no mencionar al sol, que por cierto, no gira) y que se trabaje más los versos.
Porque por otro lado, David Otero es una de las más frescas opciones del rancio panorama español que podemos encontrar, y su música llena "de sol" nuestras vidas, como deja continuamente patente.
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